domingo, octubre 24, 2004

Entretiempo.

Hace bastantes días que no escribía por aquí. I'm sorry.
No tengo excusa para no haber escrito, que esta vez he visto que alguno se ha acercado por aquí y se ha tomado la molestia de leerme; y puestos a escribir, lo he hecho con tanta asiduidad en una de las listas de correo de mensa, que podría haber puesto algo aquí.
Pero bueno, como "estamos en familia", y no creo que nadie lea esto para saber de mi vida de verdad (bueno, Nadal, tú entras cada mucho tiempo), pues me se perdona, y chis pum.

¿Y qué ha pasado en todos estos días?
Bueno, pues no demasiadas cosas. Mucho trabajo en mi trabajo, ya que esta semana que va a entrar pillo vacaciones de nuevo (son las fiestas mayores de mi pueblo, la Fira d'Onda); muchas extraordinarias horas con mis hijos; un poco de tos, mocos, dolor de cabeza y algo de drogarse con paracetamol, ponerme de nuevo (tras siete semanas) internet en casa, etc.

Y algunos detalles pequeños, de esos que hacen que la vida siga y sea feliz.

Bueno, pues ale, pues eso; el próximo post, en un momento, sobre algo más divertido.

miércoles, octubre 13, 2004

Resfriado.

Muy pocas veces pillo un resfriado. Y cuando lo pillo, salvo excepciones, suele haber un día malo al principio, y el resto voy recuperando poco a poco (sobretodo si el susodicho día malo no salgo de casa y me dedico a vegetar y poco más).
Pues bien. Adivinad: ¿qué día ha podido ser mi "día malo" en mi constipado actual...?

En efecto, ayer, fiesta nacional. Sin salir de casa. Porque, además, llovía (si llego a salir hoy no sólo no vengo a trabajar, sino que les doy trabajo al Hospital o al Depósito de cadáv...estoooo...pues eso).
Y como mi mujer trabajaba, pues me tocaba cuidar de mis inocentes angelitos.
Angelitos que, un día lluvioso y sin salir, se convierten en Godzilla por triplicado.

Aún así, no lo pasamos mal, sino que resultó un tarde de lo más entretenida.
Se me ocurrió hacer manualidades recortando una caja de cartón, comimos palomitas e hicimos fanta mágica (tang, algún día lo explico) mientras veíamos la peli esa del Emperador de Disney.

Sigo pensando lo mismo: si tú estás nervioso mientras cuidas a los niños, ellos estarán más nerviosos, propensos a caerse y a romper cosas y gritar y llorar.
En cambio, si estás tranquilo y agusto, ellos se divierten sin más problemas.
Los niños se contagian de las propias emociones de los adultos con los que conviven. Habrá (hay) que tenerlo en cuenta.

Y hoy, con un enorme dolor de cabeza, ya he venido a trabajar. Con los pinchazos dentro de mi cocorota, añoro aquella época en que la responsabilidad era ir al cole o a la universidad o al instituto, y nada más. Hoy habría dormido, como poco, cinco horas más.

Aix. Qué malito estoy y qué poco me quejo (esta frase quien la dijo?).

lunes, octubre 11, 2004

Bailando rock'n'roll.

Como algunos ya sabréis, pertenezco a la tribu urbana rocker (en mi pueblo somos dos, mi hermano y yo, que el tercero emigró a Castellón).
Hace muchos años, cuando la abundancia capilar acompañaba, llevábamos tupé y todo. Hoy no es el caso (ni tupé, ni abundancia capilar, ni nada de nada); hoy me hago acompañar a veces de un pañuelito rocker (una bandera americana surista), y nos gusta la música de ese estilo.

¿Y por qué os cuento todo esto?
Porque este fin de semana, entre otras muchas cosas, me he dedicado a bailar rock'n'roll.

Viernes y sábado ha sonado en mi casa el CD de "Rock'n'Roll Club", de Carlos Segarra (de Los Rebeldes), enterito todo él; el domingo, sólo sonaron unas pocas canciones.


Y lo mejor de todo: mis acompañantes en el baile, que resultaron ser mis tres hijos (tocando todos una guitarra imaginaria, saltando por los sofás y gritando ¡rock and roll!).


viernes, octubre 08, 2004

Viajero.

He visto por ahí en algunos blogs (Hetoo, Gorpik y Capitán Napalm) un mapa donde puedes colorear los países de Europa que has visitado.

Bueno, pues voy a ello, a ver cómo queda.



create your personalized map of europe

Ejem... ¿me ha quedado chulo?

(Por si caben dudas.... No, Andorra no está coloreada).

jueves, octubre 07, 2004

Calle de la piruleta.

Tras pasar un tiempo aciago, me he dado cuenta de que soy bastante feliz.
Así, como suena.
Con mis hijos, con mi casa, con mi trabajo, con mis quehaceres diarios. Siempre tengo cosas que hacer (y poco tiempo para hacerlas), y he aprendido a verlo como una suerte, y no como una maldición.
Mi agenda podría ser estresante, pero a mí me encanta estar ocupado e ir haciendo cosas.

Tengo una escala de valores personal envidiable: en primer lugar, mis hijos. Valoro el tiempo que paso con ellos, lo disfruto, y creo que puedo estar logrando que se contagien y el disfrute sea mutuo. Y si ellos están bien y son felices, es muy complicado que yo no lo esté y no lo sea.

Hasta hace poco, no era así. Mil problemas, tareas y complicaciones (de corte político, laboral, de pareja o de economía doméstica) me llevaban de cabeza. Pero ahora no.

Me he dado cuenta de todo esto, de una forma objetiva, en dos momentos:

- Hace una semana, llegué a casa pero no había nadie: mi mujer y mis hijos habían ido a realizar una tarea. Como yo sabía dónde estaban (cerca de mi casa), me fui a buscarles andando. Y paseé diez minutos, la mar de tranquilo, pensando en nada. Me di cuenta de que estoy agusto en mi vida.

- Hace dos días, mis hijos mayor y pequeño se durmieron en el comedor. Subí con el mediano, a leer un cuento (esta vez, exclusivamente para él), y aprovechando que no había ninguno de sus hermanos para interrumpirle, el niño decidió contarme con pelos y señales todo lo que había sentido y hecho durante el día. Sus impresiones, inexactas e imprecisas, sus saltos de un idioma a otro, y sus valoraciones o juegos, eran un encanto. Hablaba según le venían los pensamientos a la cabeza, sin una estrcutura sintáctica y chorradas de esas. Yo le escuchaba extasiado, y el no paraba de hablar. Cómo quiero a ese chiquillo. Al final, conté un cuento rapidísimo y nos pusimos a hablar del cuento. Al rato, él ya no me seguía la conversación. Había cerrado los ojos, y se había quedado dormido. Le arropé, y salí de su habitación. A todos mis amigos que en ocasiones estén agobiados, les deseo los cuarenta minutillos que me pasé con mi hijo Salvador esa noche.

Hace dos noches tuve una interesante conversación. Sobre el descontento general de la gente, el inconformismo, o el gran sacrificio de la vida diaria. Y yo no veo eso en mi vida por ningún lado.

Así que hice una localización de mi vida, parafraseando a Homer Simpson: vivo en el país de la gominola, calle de la piruleta.

lunes, octubre 04, 2004

Nuevo blog.

Acabo de dar de alta un nuevo blog. Se llama "tres aventuras", en referencia a mis hijos Juanmanuel, Salvador y Martín.
Y mi idea es escribir en ese nuevo blog mis impresiones, vivencias y aprendizaje como padre de mis tres hijos. Espero que os guste (yo, por mi parte, intentaré tomármelo en serio, aunque, evidentemente, no con un posteo diario o cuasi-diario, sino sólo cuando pueda contar o expresar algo que merezca la pena; aunque me auto-obligo a un post semanal como mínimo).

Lo he dado de alta en blogspot, aunque mi idea original era darlo de alta en otro sitio; tal vez lo traslade, y así aprenderé más de todas estas cosas.

¿Y por qué he dado de alta este blog justamente hoy?
Porque hoy mi hijo pequeño empieza el tratamiento en la estimulación del desarrollo. Y aquí estoy, en mi oficina de trabajo (mientras como algo, no penséis mal), escribiendo esto mientras mi pensamiento está a 70 kilómetros, esperando llegar a casa y que me cuenten cómo ha ido todo. Mi hijo (ninguno de ellos), evidentemente, se beneficia de que escriba sobre ellos, ni siquiera lo sabrán (tal vez dentro de unos años)... pero así me siento cerca.

Son lo mejor que me ha pasado en la vida, sin duda. Y esta es una forma, como otras muchas, de estar cerca suyo, y de acompañarles y aprender junto a ellos.

Hace casi un año, di forma a este blog, con la ayuda de amigos del canal #mensa de irc. Pasó a ser una fuente de expresión divertida y novedosa. Mi blog, mi diario personal en internet. Un tiempo después, di de alta uno para mi hermano, donde escribimos a veces en un tono más divertido y crítico (escribimos mucho más esporádicamente). Y ahora iniciaré éste, a ver cómo sale la cosa.
Ya me diréis si os pasáis por allí y lo leéis.

PD.- Bueno, y de paso que he metido un nuevo enlace (el del nuevo blog), he sumado muchos enlaces más en lo de "otras bitácoras" (los que me he acordado en este momento, perdón si me olvido alguno, que en cuanto los repase leyéndolos de vez en cuando los pongo, hu promet).